Administración de medicamentos: Preparar y administrar medicamentos por diversas vías, siguiendo las indicaciones médicas y asegurando la seguridad del paciente. Monitorización de signos vitales: Tomar y registrar la temperatura, pulso, presión arterial, frecuencia respiratoria, y otros signos relevantes para evaluar el estado del paciente. Cuidado de heridas: Limpiar, desinfectar y vendar heridas, aplicando técnicas asépticas para prevenir infecciones.